Dícese de la persona abatida, medio enferma o con flojera por hambre o exceso de trabajo (V. matungo). Es una VIEJA voz castellana -de “escaecer”, que dicen por Salamanca, Segovia y Albacete, de “descaecer, desfallecer, enflaquecer”- conservada en algunos pueblos grancanarios de tierra adentro.

¿QUIERES COMPARTIR ESTE CONTENIDO EN REDES SOCIALES?
Acepta las cookies "SOCIALES" desde AQUÍ

Dejanos un comentario