El mundo del libro en Canarias recibe con consternación la noticia del fallecimiento de Antonio Rivero Suárez, fundador de la emblemática Librería Canaima de Las Palmas de Gran Canaria. Rivero se dedicó al sector desde los 14 años, dando sus primeros pasos en 1940 en la librería Selecciones de Paquita Mesa, donde conocería a Pancho Guerra. Fruto de aquella relación de juventud, Antonio Rivero aportó numerosos datos sobre la figura de Pancho Guerra en los años en que la actividad de nuestro escritor se centraba en la publicación en la prensa de 'Los famosos cuentos de Pepe Monagas'. La Fundacion Pancho Guerra muestra su pesar a la familia del librero y la gran familia de lectores y amigos de un histórico en la difusión cultural de Canarias.
En un artículo de Amalia García-Alcalde publicado en La Provincia, se destaca que "Ayer terminó una vida dedicada al libro. Antonio Rivero Suárez, fundador de la mítica Librería Canaima, situada en la calle Senador Castillo Olivares, 5 y 7, de Las Palmas de Gran Canaria, ha fallecido a los 95 años a causa de un ictus. Su pérdida deja un enorme vacío en el universo del libro en Canarias, pero también un importante legado que sigue vivo en manos de sus hijos, Laura y Antonio, quienes regentan actualmente la librería capitalina.
Antonio Rivero Suárez nace el 10 de marzo de 1926 en Las Palmas de Gran Canaria. A los 14 años comienza a trabajar como aprendiz, como repartidor, en la que entonces era la librería de Paquita Mesa (donde ahora se encuentra el Cicca), origen de la librería Selecciones. Este primer contacto con el mundo del libro será decisivo en el desarrollo de su vida. Su hijo narra que Rivero siempre contaba que “en el sótano de esa librería Pancho Guerra escribía los Cuentos de Pepe Monagas en una máquina en que se redactaba muy rápido. Mi padre los llevaba después a que se publicaran en el periódico por fascículos. Con 19 años ya lo hicieron encargado de la librería”.
En julio de 1951, época de emigración canaria, viaja a Venezuela, al igual que dos hermanos, donde trabaja en una tienda de deportes, comienza a repartir “estampitas, en bicicleta por Caracas y se lleva dos baúles de novelas desde Canarias que empieza a vender en librerías, hasta que crea una, que comienza en un almacén para luego ir creciendo”, señala su hijo, “e inicia así la que años más tarde sería una de las principales distribuidoras de libros de Caracas, Distribuidora Rivero Suárez, que reparte las grandes editoriales españolas, mexicanas y argentinas en Venezuela. Mi hermana y yo nacimos en Caracas. Regresamos en 1976 a Gran Canaria, transcurridos 25 años desde la llegada de mi padre a Venezuela, de donde conservaba muy buenos amigos y recuerdos”.
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Fundación Canaria Pancho Guerra